225 grs de mantequilla a temperatura ambiente
1 huevo XL
1 huevo XL
425 grs de harina de repostería
175 grs de azúcar
150 grs de mermelada de fresa casera para decorar (Esther utiliza mermelada de frambuesa)
30 grs de azúcar glass para decorar
Elaboración:
Tamizamos en un bowl la harina y la sal.Por otro lado, batimos la mantequilla junto con el azúcar y la vainilla a velocidad media con la paleta batidora durante 4 minutos, hasta que se haga una pasta suave y blanquecina.
Bajamos la velocidad al mínimo y añadimos el de huevo, batiendo durante un par de minutos hasta que esté todo perfectamente integrado.
A continuación incorporamos los ingredientes secos y seguimos batiendo un par de minutos más.
Bajamos la velocidad al mínimo y añadimos el de huevo, batiendo durante un par de minutos hasta que esté todo perfectamente integrado.
A continuación incorporamos los ingredientes secos y seguimos batiendo un par de minutos más.
Hacemos una bola con la masa, la envolvemos en film y refrigeramos durante una hora al menos (la refrigeré de un día para otro).
Estiramos la masa con un rodillo y la cortamos con un cortapastas(la mitad de las galletas deberán ser cortadas con uno más pequeño), traspasando las galletas a una bandeja de horno forrada con papel (deben de quedar finas, ya que la galleta será doble) .
Precalentamos el horno a 165º con aire y mientras, refrigeramos las galletas formadas durante 30 minutos. Horneamos, a medio-alta altura, durante 15 minutos. Una vez cocidas, dejamos que se enfríen en una rejilla.
Por otro lado, introducimos la mermelada en un biberón para repostería y echamos un poco en cada galleta entera, espolvoreando con azúcar glass las galletas agujereadas.
Seguidamente cubrimos las bases con mermelada con la galleta superior.Para su conservación, las introducimos en una lata (una vez frías). Se conservan bien bastantes días.
Precalentamos el horno a 165º con aire y mientras, refrigeramos las galletas formadas durante 30 minutos. Horneamos, a medio-alta altura, durante 15 minutos. Una vez cocidas, dejamos que se enfríen en una rejilla.
Por otro lado, introducimos la mermelada en un biberón para repostería y echamos un poco en cada galleta entera, espolvoreando con azúcar glass las galletas agujereadas.
Seguidamente cubrimos las bases con mermelada con la galleta superior.Para su conservación, las introducimos en una lata (una vez frías). Se conservan bien bastantes días.
Muy buenas se ven así rellenas.
ResponderEliminarUn saludito
Que buenas se ven, te salieron perfectas ,sin duda alguna para empezar a comer y no dejar ninguna,besos
ResponderEliminarMmm! Me gusta este tipo de galletas, saben deliciosas, te han quedado muy apetitosas! Besitos!
ResponderEliminarMuy apetecibles!!! Y bonitas!!
ResponderEliminarUnas galletas riquísimas, seguro que nada que ver con las compradas, me parece una idea estupendas rellenarlas, qué ricas!!un beso
ResponderEliminarBuenoooo! Con lo que le gustan a mi madre este tipo de galletas. Compra las de Ikea y le encantan,con eso te digo todo.
ResponderEliminarPero ni punto de comparación con etas que nos presentas tú caseritas.
Te han quedado de pastelería.
Haré un hueco para sorprender a mi madre.
Bicos!