La mămăligă es una receta muy popular en Rumanía (también en Moldavia), que consiste en una masa preparada con harina de maíz molida (similar a la polenta italiana) agua y sal.
En tiempos remotos se consumía como sustituto del pan y actualmente se consume junto con sarmale, verduras o carne. También se sigue consumiendo como sustituto del pan, cortando las rebanadas con un hilo.
Yo he preparado la receta tal y como la comimos en el restaurante más popular y antiguo de Bucarest.
Ingredientes para 2 personas:
Un vaso de harina de maíz amarilla (de venta en tiendas de alimentación de países del Este. En Madrid, en grandes superficies.)
3 vasos de agua
Una cucharada rasa de sal
Una cucharada de mantequilla
Un huevo
Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
Queso Telemea rumano (en su defecto, queso Feta)
2 cucharadas colmadas de crema agria casera
Elaboración:
Echamos el agua y la sal en una cazuela y dejamos hervir. Bajamos el fuego (en mi placa de inducción del 1 al 9, en el 6). Echamos poco a poco la harina en forma de lluvia y removemos con varillas o una cuchara de palo.
Seguimos este proceso de remover cada muy poco, durante 20 minutos aproximadamente, para que no se pegue a la cazuela y no se formen grumos. A mitad de cocción incorporamos la mantequilla y seguimos hasta que la masa se despegue de la cazuela.
Una vez lista, vertemos la mezcla en un molde (en mi caso, un cuenco) y dejamos que se enfríe.
Por otro lado, hacemos un huevo a la plancha en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra; volcamos la masa de maíz en un plato, rallamos el queso por encima, coronamos con el huevo y acompañamos de la crema agria.
Hola Olga!. Agradezco un montón tu receta, la cual desconocía ya que siempre asociamos polenta a Italia. Yo descubrí la sémola de maíz que también los italianos la utilizan para dicho menester y un sin fin de recetas hace pocos años, pero como mas la he utilizo es para sopa ya sea de verdura, pescado o para sopa del puchero de mi tierra. Comenzaré a partir de esta receta tuya a hacer polenta, ya te cuento. Hacer cocas con harina de maíz es típico de mi pueblo y me encantan me las como aun sin tener relleno e incluso crudas, quien me iba a decir a mi ya desde pequeña que el maíz que tanto me gustaba iba a ser básico para mi ahora.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola querida amiga, espero que las fiestas hayan ido muy bien y que hayas podido disfrutarlas con los tuyos. Nosotros lo tuvimos que hacer en petit comité, de 15 personas que teníamos que estar en Navidad solo estuvimos 4.Me has dejado muy intrigada con esta receta. La verdad es que nunca he probado algo así. Ahora que he descubierto una tienda de productos rusos y del Este donde compré huevas de salmón preguntaré por estos ingredientes que has utilizado. Me ha gustado, siempre apetece probar cosas nuevas. Seguro que en tu casa no estáis aburridos a la hora de comer¡¡¡ Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola Olga. Confío en que hayas pasado unas estupendas fiestas navideñas y que este año haya comenzado estupendamente.
ResponderEliminarLa harina de maíz, la amarilla jj, solo la probé hace ya muchos años cuando íbamos al pueblo de mi padre en el verano. Hacían unas gachas con un caldo que estaba de vicio. Desde entonces no la he vuelto a probar y ya ha pasado casi una vida jj.
Una curiosa receta la que nos presentas y que no cabe duda estará muy rica.
Un abrazo.